Una tendencia que se ha visto en México, según el INEGI, es que cada vez más gente renta y es menos la que compra a crédito. La razón: la economía. La explicación: los intereses generados por el crédito superan la plusvalía que pueda generar la vivienda.

Esos intereses se suelen cubrir durante los primeros años de los créditos (180 meses después de haber empezado a pagar tu préstamo, apenas comenzarás a pagar el valor del inmueble). Otra desventaja es que aunque el valor del terreno suele aumentar con el tiempo, el de la construcción decrece, y la única manera de mantenerlo estable es invertir más en reparaciones.

En el caso del alquiler, si bien la vivienda no es propia, el incremento de la renta suele ser de un 10% cada cinco años. Rentar permite tener cierta liquidez que, aprovechada con un plan de ahorro inteligente (sin endeudarse con un crédito), a unos 10 a 20 años, según el nivel de ingreso, podría darnos lo suficiente para liquidar la vivienda por completo en un solo pago. Nada mal, ¿no?

SABÍAS QUE…

Los intereses de un préstamo hipotecario se suelen cubrir durante los primeros años de vida del crédito, es decir, 180 meses después de haber empezado a pagar tu préstamo, apenas comenzarás a pagar el valor del inmueble.